La osteopatía pediátrica consiste en el tratamiento manual del bebé para mejorar los tejidos y estructuras para que su sistema funcione mejor. Este camino lo inició Violna Fryman en EEUU y continuó en Francia donde existe una gran tradición en la osteopatía pediátrica.
La base de esta práctica se basa en tratar todo las patologías o disfunciones más comunes del neonato como pueden ser: tortícolis congénitas, asimetrías craneales, displasia de cadera, bebés prematuros, problemas digestivos tanto de reflujo, cólicos del lactante, estreñimiento, partes instrumentales o cesáreas . Estos son los motivos de consulta más comunes que encontramos en clínica.
También hay una gran parte de disfunciones que afectan al sistema respiratorio como por ejemplo, bronquitis, asma o sinusitis. Los tratamientos no son invasivos para el bebé y los beneficios pueden ser muy importantes.
En los casos donde la patología es más grave, la relación entre el equipo multidisciplinar, el médico, logopeda, fisioterapeuta y / o terapeuta ocupacional es esencial para la buena salud del niño. Otros aspectos que también tendremos presentes del bebé serán:
Son muchas las disfunciones y patologías que podemos encontrar en pediatría y que pueden ser tratables. No hay que olvidar que la osteopatía infantil también trata a niños mayores. Los problemas más frecuentes son escoliosis, cefaleas, alteraciones estructurales como valgo o var de rodillas y / o problemas relacionado con el crecimiento.