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¿Quieres evitar los desgarros el día del parto y facilitar el nacimiento de tu bebé?

Evitarlo está, en cierta medida, en tus manos. Si preparas tu Periné durante el embarazo y cuidas de la Postura y el Pujo (esponderamente) durante el parto, tendrás menos probabilidades de sufrir desgarros y las episiotomías.

En cuanto al periné, es decir, la musculatura que tapiza el suelo de la pelvis, éste pierde fuerza y u200bu200bse vuelve cada vez más rígido debido al peso que debe sostener durante el embarazo (útero, placenta, el bebé...).

Esta tensión puede provocar contracturas en esta zona, ocasionando molestias en el bajo vientre. Realizando el masaje perineal conseguirás que el tejido conjuntivo de tu suelo pélvico gane elasticidad y así llegar con un periné fuerte y elástico, al día del parto.

¿En qué consiste el masaje perineal?
En el Centro Núria Caballé, como especialistas en fisioterapia abdomino-pelviana y preparto, te enseñamos a realizar el masaje perineal para que puedas relajar las tensiones de la musculatura del suelo pélvico.

El objetivo es acompañar a los músculos y tejidos que rodean la vagina, para darles elasticidad y facilitar el nacimiento de tu bebé.

Aconsejamos iniciarlo a partir de la semana 32 del embarazo (ya sea tú misma o tu pareja), durante 5 minutos, en días alternos y combinando dos maniobras: vaivén y presiones.

Cuando te enseñamos a realizar el masaje perineal, te daremos una serie de indicaciones para hacerlo correctamente:

  • Introducir dicho pulgar, en caso de automasaje. Cuando el masaje lo realiza el terapeuta o la pareja, se utiliza el dedo índice o el dedo del corazón.
  • Las maniobras deben ser suaves y lentas, tanto de la musculatura más profunda (interna) como superficial (externa), de la parte posterior del suelo pélvico y periné.
  • Siempre con las manos limpias y las uñas cortas.
  • Puede utilizarse lubricante de base acuosa o un aceite que respete el PH de la zona íntima.
  • Realizarlo en una posición cómoda (estirada, de pie con una pierna flexionada y elevada, sentada...) y relajada.

Es importante que vayas escuchando cómo te sientes y que pares si aparece dolor. Los primeros días que realizas el masaje perineal, es normal sentir molestias.

Beneficios del masaje perineal
Según demuestra la evidencia científica, el masaje perineal tiene los siguientes beneficios:

  • Mejora la elasticidad y calidad de los tejidos del suelo pélvico.
  • Aumenta la propiocepción de la zona.
  • Previene y reduce los desgarros masivos y la episiotomía.
  • Ayuda a la madre a tomar conciencia del canal de parto ya familiarizarse con su zona genital y con la sensación de presión que sentirá en el momento en que la cabeza del bebé atraviese el canal del parto.
  • Implica a la pareja en el proceso de parto.

Fisioterapia y masaje perineal
¿Quieres aprender a masajear perineal? Te recomendamos apuntarte a este taller y, durante la semana 30-32 del embarazo, venir a visitarte con nuestro equipo de fisioterapeutas especializados en abdomino-pelviana y preparto.

En esta visita, realizaremos una valoración y tratamiento de todas las estructuras que tienen relación con el suelo pélvico (diafragma torácico, fuerza previa del suelo pélvico y competencia de la faja abdominal). También realizaremos el masaje perineal de forma guiada, para que sientas cómo hacerlo correctamente.

Asimismo, para preparar el suelo pélvico para el día del parto, es fundamental mover la pelvis a lo largo del embarazo (sobre todo durante el tercer trimestre). Su finalidad es flexibilizarla y liberarla de tensiones.

Por otra parte, te recomendamos realizar ejercicios de conciencia y contracción de suelo pélvico, como los Kegel. Practícalos junto con ejercicios que trabajen toda la zona abdomino-lumbo-pelviana, de la que forma parte el suelo pélvico.

Recuerda que en el Centro Núria Caballé realizamos cursos preparto personalizados para ti y tu pareja, y clases de gimnasia para embarazadas, donde ponemos en práctica estos ejercicios de preparación al parto.

La teoría de las 3P
Como decíamos y según explica la teoría de las 3P, el Perineo, la Postura y el Pujo (esponderamientos) son tres factores que hay que tener presentes para reducir el riesgo de desgarros y episiotomías durante el nacimiento de tu bebé.

En cuanto a la postura y los esponderamientos durante el nacimiento, éstas son las recomendaciones que tendrás que tener en cuenta:

  • La postura debe favorecer la fase expulsiva del parto. Por tanto, debería ser:
    • Incorporada ya favor de la gravedad.
    • Con el sacro libre para poder abrirse y dejar pasar al bebé hacia el tercer estrecho. Recomendamos posturas de rodillas, de lado y en cuadrupedia.
    • Realizando una rotación interna de las caderas, con los talones hacia fuera. Para abrir el estrecho inferior (la distancia entre los dos isquiones, el pubis y el cóccix) y facilitar la salida del bebé.
  • Esponderamiento (Pujo). Lo ideal es el esponderamiento en espiración, porque es el más fisiológico. Así lo detallan la Guía de Parto Respetado de la Organización Mundial de la Salud (OMS), La Guía de Práctica Clínica sobre la Atención al Parte Normal del Ministerio de Sanidad y el Protocolo para la Asistencia Natural en el Parte Normal de la Generalidad de Cataluña. ¿Cómo se realiza?
  1. Inspira y coge aire tanto aire como puedas.
  2. Déjalo frenando los labios (espiración frenada) y en una posición incorporada. De esta forma la fuerza del esponderamiento la realiza el diafragma, presionando el útero y activando la zona abdominal, para ayudar a la salida del bebé.

Otras especialidades de fisioterapia del suelo pélvico y faja abdominal

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